Con este tratamiento conseguiremos mantener una perfecta hidratación y nutrición en pieles cuidadas.
Combinación manual con aparatología.
La limpieza es el cuidado básico de la piel. Imprescindible.
La piel refleja nuestro bienestar. Cualquier cambio, desequilibrio o alteración que sufrimos, se ve reflejado directamente sobre ella.
Los problemas que puede ocasionar el no realizar la higiene adecuada son:
- Microquistes
- Piel asfixiada o apagada
- Color cetrino
- Flacidez
- Envejecimiento prematuro
La disciplina y la constancia día a día en la limpieza del rostro, acudir regularmente a un centro especializado, una puesta a punto, y utilizar como mínimo 3 meses un tratamiento facial recomendado por un especialista, es la base de un buen cutis.